miércoles, 25 de agosto de 2010

Ezio regresa con un nuevo Assassin's Creed

Ezio Auditore translada su lugar de trabajo a Roma, para enfrentarse a nuevos y poderosos enemigos. Además, por primera vez... ¡¡Con modo multijugador incluido!!
Ezio Auditore quiere seguir dando estopa, aunque esta vez ha cambiado la cuna del renacimiento italiano por la Roma del siglo XVI. Eso sí, UbiSoft Montreal, nos ha aclarado que estamos ante una secuela en toda regla y que, si no se llama Assassin’s Creed III, es por que al bueno de Ezio todavía le quedan muchas misiones que resolver. Para demostrarlo, esta aventura comienza justo al final del título anterior, en nuestra cruzada contra los templarios. Eso sí, aunque la mayor parte se desarrollará en el pasado, también disfrutaremos de algunos escenarios actuales –concretamente en el año 2012- donde acompañaremos a Desmond Miles, que conectado a la máquina llamada el Animus, podrá encarnar a sus antepasados.

Un argumento de los que hacen vibrar

En el nuevo argumento, el protagonista ya no buscará venganza, sino que se convertirá en un reputado asesino. Hará de revolucionario intentando eliminar a los tiranos que se han instalado en el poder. A pesar de que esta será nuestra misión principal, la diversión no se queda ahí. Debemos logar que la hermandad de asesinos triunfe sobre los dichosos templarios, utilizando todos los medios a nuestro alcance. Labor que, básicamente, será robarles terreno. Pero no será nuestro único cometido, ya que también seremos responsables de que la ciudad de Roma progrese, como si fuese una versión aumentada de la Villa de Monteriggione que aparece en Assassin’s Creed.

Durante toda la aventura sentiremos la amenaza de nuestros enemigos, aunque en esta ocasión no sólo serán guardias y templarios, también nos enfrentaremos al mismísimo poder Papal, con su hijo el general del ejército del Vaticano César Borgia a la cabeza. Las batallas contra este y sus hombres prometen ser divertidísimas, pues tan digno adversario será un hueso duro de roer para Ezio. Eso sí, contaremos con la ayuda de un montón de personajes, como Maquiavelo o el mismísimo Leonardo da Vinci, que ya hacía un papel al estilo Q en su anterior aventura.

Un sistema de juego mejorado

La forma de jugar no dista mucho de lo visto en Assassin’s Creed II, es decir, que mantendrá el estilo de infiltración en un entorno abierto. Eso sí, en esta ocasión podremos reclutar aprendices de asesino, para delegar algunas de las tareas a estos nuevos miembros de la hermandad. Además, se nos permitirá personalizar su aspecto, a través de una pantalla especial del Animus y podremos llamarlos durante los combates, para que nos ayuden con sus inestimables  habilidades.

Otro de los cambios que vamos a encontrar será el uso de los caballos. Mientras que en los dos primeros título las monturas se limitaban a ser un mero medio de transporte, en esta ocasión tendremos habilidades extras que nos permitirán luchar desde el animal y, sobre todo, no tener que desmontar si entramos a una ciudad. Precisamenet, Roma será enorme y estará dividida en cinco distritos –el Tíber, el Vaticano, el Centro de la Ciudad, la Campiña y la Zona Antigua- cada uno con su propia personalidad. Hay que tener en cuenta que muchas zonas de estos distritos sólo podremos visitarlas a lomos de nuestra montura.

¡¡Por fin un multijugador!!

Una de las novedades más notables será el modo multijugador, algo que pedían a gritos todos los fans de la saga y que Ubisoft tenía en mente hace algún tiempo. Y es que si recordáis, al princpio de Assassin’s Creed II, más concretamente durante la huida de Abstergo, veíamos un complejo lleno de máquinas Animus donde se entrenaban los templarios. Así, Ubisoft ha querido justificar que nuevos personajes puedan viajar al renacimiento y encarnar a distintos asesinos.

Durante las partidas multijugador, no controlaremos ni a Ezio ni a Altair, ya que serían demasiado poderosos comparados con los asesinos normales. Eso sí, tendremos a nuestra disposición todo un elenco de personajes básicos –cortesanas, merodeadores, verdugos, nobles, sacerdotes o doctores- que se podrán personalizar según el estilo de juego que nos guste. Lo que se traduce en que cada uno tendrá unas habilidades diferentes que debemos potenciar para imponernos durante los combates contra otros jugadores en Internet. Parece como si los equipos responsables de Splinter Cell y Assassin's Creed intercambiaran ideas habitualmente.



0 comentarios: